jueves, 17 de mayo de 2007

Grito de guerra:

"Mírala, no se sabe ni maquillar"

Alter ego: Chapulín Colorado.



Más ágil que una tortuga... más fuerte que un ratón... más noble que una lechuga... su escudo es un corazón... es ¡El Chapulín Colorado!




El superheroe por excelencia de Latinoamérica tiene más mérito que el propio Batman o que el mismísimo Superman en lo que a su privacidad concierne. Si alguien sabe quién es este señor cuando nadie lo ve, por favor escríbalo en este blog y compártalo con el mundo. No pretendemos en ningún momento ser el niño que se te acerca y te dice "El niño Jesús no existe" y corre antes de que entiendas qué fue lo que te dijo, pero luego de tantos años es necesario saberlo. Basta ya de secretos Chapulín, no contábamos con tanta astucia.



Yo, por mi parte, siempre he tenido serias sospechas de que quien se esconde bajo las antentinas que detectan toda presencia enemiga es Carlos Sicilia. El parecido es tan delator, que es casi innegable que cuando Sicilia no está haciendo programas de tv, defiende al mundo del Rascabuches.

¿Y si nadie dice "nada"?


De aquí al certamen de belleza, corazón. Mal augurio para los creadores del fútbol, es ver dos veces a un zorro el mismo día, Mala suerte para el carro es tirar dentro de él, y de pronto, ya nada tiene que ver con nada.


¿De verdad existe una ducha que te libre de pecados?, ¿No hay más muro que el de los lamentos? Yo creo que simplemente nos olvidamos que puede ser, sólo por especular, todo parte de una paranoia. Así de que te entierro o no te entierro, de que te hundo o no te hundo, y hasta peor, de que te compongo una canción o no te la compongo, mi amor. Calma que no viene el lobo, y si nadie habla, no es porque con esta cinta, mujer, te pueda hacer caer directamente a mi bolsa.

No hay nada mejor que nada que no tenga que ver con nada de nada.

Yo no soy el enemigo.